Parece ser que el abuso de monopolio en telecomunicaciones se paga. Que se pague caro o no, más que depender de la cifra depende de lo que la multa suponga en comparación con la facturación del multado. Esta misma semana, la Comisión Nacional de Competencia sanciona a Orange, Vodafone y Movistar por abusar de su posición de dominio en el en el mercado mayorista de los SMS.
El abuso de la posición de liderazgo ha afectado a los servicios de terminación de mensajes cortos SMS, debido a la libertad en la fijación de precios mayoristas de estos servicios. El precio fijado ha sido considerado demasiado caro, lo que ha afectado a muchos operadores móviles, que han visto en estos precios una importante barrera de entrada al mercado. La falta de regulación a este respecto entre el año 2000 y 2009 tampoco ha ayudado demasiado.
Movistar ha sido multada con 46.49 millones de euros, Vodafone con 43.52 millones de euros, y Orange con 29.9 millones de euros. Se calcula que estas multas suponen sólo un 0.59% de las ganancias obtenidas.
Muchos sectores han recibido con buenos ojos la noticia, al igual que distintas asociaciones de consumidores, como es el caso de la OCU. A pesar de que la CNC ha tomado cartas en el asunto y ha dictado una resolución ante el supuesto abuso de liderazgo, la intención de los muchos operadores que se han podido ver afectados es poder llegar a una regulación a este respecto, para que no sea necesario reaccionar ante prácticas ya dadas, y sobretodo conseguir eliminar periodos de vacío legal como el producido entre 2000 y 2009.