67 millones euros ha impuesto de multa la Unión Europea a Telefónica, como consecuencia de los acuerdos entre la compañía y Portugal Telecom, alcanzados en 2010. Telefónica ya ha comunicado que recurrirá.
En verano de 2010, Telefónica cierra un acuerdo con Portugal Telecom para la compra de la participación que ésta última tenía en el operador de telefonía brasileño Vivo. El acuerdo explicitaba también la intención de ambas de no competir entre ellas a partir se septiembre de 2010 ni en España ni en Portugal.
Según la Comisión Europea, el acuerdo es ilegal, pues implica la no competencia entre ambas compañías en territorio ibérico, lo que se ha traducido en una reducción de alternativas para los consumidores, así como en un aumento de precios. Telefónica, por su parte, responde que los acuerdos fueron públicos, y que tras examinar la legalidad del acuerdo, éste se eliminó y nunca fue aplicado, razón por la cual recurrirá de inmediato.
Portugal Telecom tampoco ha salido demasiado bien parada en este asunto, pues la multa que se le ha impuesto, si bien está lejos de la cifra que Telefónica tendrá que asumir, es de 12,2 millones de euros.
No se trata de la primera multa que se le impone a la compañía española desde Bruselas. En 2007, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) ya impuso 152 millones de euros de multa por abuso de posición dominante en el segmento de la banda ancha en España. Faltará esperar ahora a la resolución europea sobre esta cuestión una vez Telefónica recurra. El asunto, sin duda, parece ir para largo.